Muebles para todos los gustos…

 

En Los Cavazos no todo es comida, otro de los atractivos del paraje comercial son los muebles. Hoy en día son muchos los locales que se dedican a comercializar desde comedores, recámaras, cunas, sillones, sillas, roperos, etc.

La mayoría de los productos están elaborados en madera y así como hay tiendas con enfoque rústico donde sobresale el color y textura real de la madera, también hay locales donde los muebles tienen un estilo contemporáneo y las líneas rectas y colores oscuros son la base de los diseños.

Además, los locales comerciales ofrecen todo tipo de elementos de decoración: cuadros,  floreros, fruteros, adornos para pared, entre otros. Todos y cada uno de los productos elaborados por manos artesanales y para todos los tamaños de bolsillo.

Una muy buena opción para adquirir muebles y decoración ya sea para el hogar como para la oficina, muebles de buen gusto y la mejor calidad.

 

Eloteeeeeeees calientiiiiiiitooooos!!!!

Y para este frío un delicioso y calientito ¡elote desgranado! ¿a quién se le antoja?

Por: Gaby Tovar

¿Sabes algo de la historia de este delicioso manjar que es toda una tradición en nuestro país? yo no se nada, solo alguna vez en la escuela leí que en el Popol Vuh hay una leyenda sobre como los mayas explicaban la creación y según ellos, el hombre provenía del maíz, eso significa que en la época de los mayas ya se conocía este cereal, el cual cuenta con mayor volumen de producción en el mundo, ya que gracias a él se produce la tortilla y con ella podemos hacer de todo, enchiladas, tacos, burritos, chilaquiles, quesadillas, sopa de tortilla, flautas, totopos, tostadas, papadzules, etc. Y eso no es todo, por que con la masa se pueden elaborar sopes, tlacoyos, huaraches, tamales, gorditas, picaditas, frituras, etc.

Como bien sabes, el elote se emplea para muchas cosas también, desde un arrocito con elotitos, hasta una crema super gourmet… pero aquí en Los Cavazos podrás disfrutar un delicioso pan de elote y porque no, un riquísimo elote desgranado con mayonesita, crema, limón, chilito y quesito amarillo y blanco, ¡sssssssssss! ya se me hizo agua la boca…

 

Juguetes de madera

Juguetes de madera

// Por Natalia Fernández

Los Cavazos es una zona tradicional en Nuevo León gracias a que ha logrado atraer a la gente no solo por su comercio, sino que nos ha regalado una ambiente familiar en el que podemos convivir con aspectos muy tradicionales de esta región.

Mientras caminábamos entre tiendas recordé mi niñez, ya que en muchos de los locales pude ver que siguen fabricando juguetes de madera, lo cual en particular me es fascinante, ya que gracias a los avances tecnológicos a veces a los padres se les olvida un poco que hay juguetes sencillos, artesanales, divertidos y que agilizan la imaginación de los niños aparte de mantenerlos más activos.

Estos juguetes representan dignamente al pueblo mexicano con su ingenio, humor y colorido. Podemos encontrar desde baleros, pirinolas, matatenas, cochecitos hasta trompos, matracas y lotería.

Los juguetes mexicanos son definitivamente una tradición en nuestra cultura y me enorgullezco de aquellos que siguen preservando tan bonitas tradiciones y que nos regalan juguetes como estos, fabricados a manos de artesanos de Nuevo León.

Así pues, los invito a recordar su infancia y claro por qué no revivirla comprando uno de estos juguetes.

 

Mezcal + Manzana

Producto exclusivo de "La Molienda Villalón"

Los Cavazos está lleno de contrastes y ofrece comida para todos los paladares, desde conservas, dulces regionales, aguamiel, elote, miel, etc. pero lo que llama la atención aún y antes de probarlo, son las botellas de mezcal con manzanas dentro, la unión de dos elementos característicos de la región.

Si, una manzana real en el interior de una botella. “La molienda Villalón”, local con más de 50 años de tradición en el pasaje comercial, es quien ofrece esta curiosa presentación de mezcal. Mezcal blanco joven de la Sierra de Santiago, N.L., elaborado 100% de agave Alto, este agave es conocido también como lechuguilla y es utilizado  para la producción del mezcal, aguamiel y pulque.

La técnica para lograr introducir la manzana a la botella es un secreto que ha pasado de generación en generación en la familia de los propietarios de este local comercial, pero es tanta la curiosidad que muchos incluso compran el producto por su apariencia, aún y cuando no consumirán el producto.

 

ARTESANÍAS. Belleza y Originalidad

Laura Servin

Las artesanías mexicanas son símbolo de nuestras tradiciones y ejes de nuestra creación cultural, estas ocupan un lugar importante en las actividades productivas de Los Cavazos. Hay locales comerciales con más de 25 años de antigüedad, lo cual se ve reflejado en el desarrollo y perfeccionamiento de sus técnicas, formas y símbolos, gracias a los artesanos se han ido conservando los rasgos estéticos característicos de la región ya que aparecen plasmados en una gran cantidad de objetos elaborados en distintos materiales, los más comunes son: Barro, Hierro Forjado, Joyería, Madera, Cerámica, Talavera, Vidrio, Tela, Hilo, entre otros.

Hay que aclarar que cuando hablamos de artesanías no solo nos referimos a objetos decorativos, sino también a objetos pensados con fines más útiles, como por ejemplo:

-En la cocina: ollas de barro, molcajetes, utensilios de palma, comales, etc.

-En el jardín: macetas de barro, cerámica o talavera, muebles de hierro forjado, fuentes de cantera, jaulas para pájaros, etc.

-Muebles de hierro forjado o madera: cabeceras y cómodas, muebles pintados a mano, comedores, etc.

Las artesanías mexicanas son muy apreciadas en distintas regiones porque son muestra del colorido y folklor de nuestro país, démosles el valor que se merecen.

 

CHILE DEL MONTE.- Sabor norteño!

// Por Natalia Fernández

 

Sabías que? Para los habitantes de la región noreste de México el “chile del monte” representa una fuente alimenticia, medicinal y generadora de ingresos adicionales.

Actualmente, en el noreste esta especie silvestre está fuertemente arraigada en su gastronomía típica, ya que interviene en la dieta de los habitantes en diversas formas, ya sea por el consumo de su fruto fresco o seco, en ensaladas, salsas, encurtidos, moles, etc.

Por si no lo identificas, el chile del monte es una planta herbácea que crece principalmente en la zona de matorrales en forma silvestre, con alturas promedio hasta de 2 metros, con frutos pequeños, rojos al madurar y picantes, los cuales pueden ser esféricos, ovalados o alargados. La germinación de su semilla había sido un obstáculo para la propagación de esta planta, ya que en forma natural depende de las aves, estas tienen que comerlo y digerirlo para que la semilla pueda germinar, actualmente ya se desarrollaron métodos tecnológicos para el cultivo de este chile con éxito.

Su sabor característico es muy apreciado, tanto que se llega a pagar hasta más de 20 veces el valor de chiles comerciales cultivados, como el serrano o jalapeño. En los últimos años ha crecido el interés por utilizarlo además en el área médica, encontrándole una creciente variedad de propiedades medicinales y nutricionales.

 

 

Talabarte… ¿qué?

Entramos a «El caballito», y yo iba con cara de ¿aquí qué o qué?, ¿que fue lo que encontré? mejor dicho que no encontré, desde artículos de cuero, monturas charras, texanas, silines, monturas, cintos, sombreros, chamarras, sarapes, herrajes, artículos de piel, y un par de caballos, borregos cimarrón y sapos disecados  S=

El propietario, quién fue muy amable al contestar nuestra entrevista nos contó acerca de la talabartería, ¿tu sabes qué es? yo tampoco lo sabía, ni siquiera lo podía pronunciar bien, pero el muy amablemente nos explico que la talabatería es el arte de trabajar diversos artículos de cuero, lona y lana, tales como sillas de montar de caballería, albardas y aparejos.

Las primeras monturas que fueron utilizadas hace unos 4000 años eran bastante incómodas para los estándares actuales, poco más que paños de cueros sobre el lomo del animal que tenían la función de amortiguar entre el jinete y el caballo para largas cabalgatas o la batalla.
Con el tiempo estos simples paños de cuero se fueron volviendo más elaborados, y ya en el año 700 AC los guerreros asirios cabalgaban con monturas más elaboradas e incluso decoradas. En lo que hoy es Siberia, para el 500 AC ya se usaban monturas acolchadas que combinaban diferentes materiales.

Para el 200 AC en Asia surge la montura con marco de madera, distribuyendo mejor el peso de la persona sobre el caballo, al darse cuenta de los positivos efectos sobre el caballo y su longevidad. O sea como te puedes dar cuenta el arte de la talabartería no es nada nuevo, sino que es una tradición literalmente milenaria.

Te invito a que te des la vuelta por la Talabarteria «el Caballito» un local ubicado en los Cavazos, N.L. que tiene una antigüedad de 29 años, donde encontrarás maravillosas creaciones de cuero….

 

delicia envasada

yum =9

Por: Gaby Tovar

Fruta.

¿Qué es lo primero que piensan cuando digo esa palabra? Una deliciosa rebanada de sandía con chilito y limón, unas fresas con crema, una ensalada de manzana de las que sirve mi mami en Navidad…

Son pocos los que imaginan unas deliciosas frutas en conserva ¿verdad?, que gran error cometemos, no sabemos de lo que nos perdemos…

Las frutas en conserva tienen sus inicios a principios del siglo XIX cuando un humilde pastelero francés llamado Nicolas Appert descubrió y comprobó que las conservas hervidas en sus propios envases de vidrio cerrados, se mantenían inalterables por mucho tiempo. Nicolas Appert ha pasado a la historia por ser el inventor del primer sistema de envasado de alimentos. Su procedimiento se basaba en la esterilización de los alimentos (primero legumbres y más tarde carne, pescado, frutas y verduras) tras ser calentados al baño María en botellas parcialmente taponadas; una vez terminado el proceso de calentamiento, se cerraban herméticamente las botellas forzando los tapones y sujetándolos con alambres. Aunque injustamente  no fue él quien patentó este descubrimiento, la fábrica de conservas Appert, fue la primera que comercializó diversos productos envasados, principalmente carne, leche, legumbres, frutas, zumos, mermeladas y extractos de vegetales; la fábrica se mantuvo abierta hasta 1933.

A lo largo de los años la técnica  para conservar frutas se ha ido perdiendo, sin embargo en Los Cavazos son muchísimos los puestos que realizan este delicioso arte, te invito a que los visites y redescubras esta deliciosa faena…

 

Y qué comemos?

buffet

Laura Servin.

Los Cavazos está situado a solo 20 minutos de la ciudad de Monterrey por la carretera nacional, es una buena opción para pasar el fin de semana en compañía de nuestra familia y amigos, es un lugar que se distingue por la variedad de locales comerciales para la venta de artesanías y muebles rústicos principalmente.

Después de recorrer los distintos negocios, te darás cuenta que  ahí mismo hay lugares donde puedes disfrutar de una deliciosa comida típica tipo buffet en cualquiera de los restaurantes de la zona. O si prefieres los mariscos, podrás disfrutarlos en los establecimientos que se encuentran en la Presa la Boca, a unos minutos de Cavazos.

La principal característica de los buffets es que conservan ese sabor típico de la comida en cazuelas de barro (algo tipo rustico) y claro que no puede faltar la carne asada tan característica de la región. Algunas de las comidas que se preparan lo son el asado de puerco, el cortadillo norteño, los chiles rellenos, entre otros.

Lo mejor es que podemos encontrar restaurantes que se ajustan a cualquier bolsillo, sin dejar de lado la calidad y el servicio. Entre los restaurantes más conocidos están: El Mexikanissimo, Tío Poncho, Primo Lalo, La Esquina, entre otros.

Y como postre o solo para satisfacer el antojo por qué no probar un rico elote preparado, una papa asada, frutas en conserva, pan de elote, turcos, empanadas o simplemente una agua miel de caña.

 

Pan de Elote

Tradicional Pan de Elote de Los Cavazos

Por Natalia M. Fernández

Cavazos es un lugar de contrastes. Desde el momento en que llegas sientes que estas en un escenario diferente, no hay otro lugar que se le parezca en el área metropolitana, lo primero que inunda el ambiente son los olores del inconfundible pan de elote que se produce de manera artesanal y que cada familia defiende su receta celosamente.

Por lo que respecta a la gastronomía, Los Cavazos cuenta con una diversidad única y el Pan de elote es un alimento tradicional que se ha vendido desde hace décadas en este paraje turístico y siempre ha sido muy bien comercializado entre sus visitantes.

Cavazos posee un increíble pan de elote, la receta es básicamente la misma: granos molidos que estén tiernos, harina, mantequilla o manteca, leche y azúcar, aunque por supuesto la receta varía de puesto en puesto, ya que cada familia utiliza una receta secreta. Algunos panes se hacen sin azúcar y a otros por ejemplo, se les incluyen nueces o frutos. Es importante destacar que aún se hace tradicionalmente en “aceros” de fierro vaciado, los cuales tienen una cierta medida para no hacerlos muy gruesos y obtener una superficie ligeramente tostada, que es la parte más rica del pan.

Realizar los panes es todo un arte, porque se requiere conocer la receta y el tiempo adecuado de cocción. Hay muchas maneras de preparar pan, pero esta receta tiene ese sabor norteño que lo hace diferente, esto sin duda lo hace uno de los principales atractivos culinarios de la zona.

Esta es una tradición familiar heredada de generación en generación hasta hoy en día. Algunas de las personas que se dedican a esto (sobre todo en los negocios con más antigüedad) extrañan tener sus sembradíos de caña y de maíz para la elaboración de sus productos y recuerdan como el paso del tiempo y la urbanización les quitó parte de sus tierras, las cuales conformaban parte de su medio de vida.

Hay que tener en cuenta que las familias que comercializan en Cavazos ven su negocio como necesidad y sustento de ellos y de sus generaciones futuras, también es muy importante seguir con la tradición que comenzaron sus antepasados de estos manjares de alimentos-

Recuerden lo que bien se dice por ahí: no se conoce un lugar más que por su gente y su comida.